Lanthinos lo vuelve a hacer: “Bugonia”

Yorgos Lanthinos es el director más emblemático de lo que se conoce como la Greek Weird Wave: una ola de cine griego contemporáneo caracterizado por historias extrañas, absurdas, críticas con lo social, con guiones retorcidos, situaciones incómodas y atmósferas perturbadoras. El mejor ejemplo lo hemos disfrutado con “Extrañas Criaturas” -Poor Things (2023), 7.8 en IMDB- que, de no haber sido por la presencia de Oppenheimer ese año, habría sido mi candidata para ganar el Oscar a mejor film del 2023. Lanthinos vuelve a sorprendernos, positivamente, este 2025 con otra cinta bastante retorcida pero muy buena como espectáculo cinematográfico. Nos referimos a “Bugonia” (7.5 en IMDB), ya incluida en la lista de las diez mejores películas del año por el American Film Institute.

Teddy es un apicultor y consuetudinario navegador en la dark web, lo que lo ha convertido en fiel creyente de teorías conspiranoicas. Entre ellas, que la disminución sostenida de la población mundial de abejas es debida a un fenómeno instigado por extraterrestres el cual, luego de la comprobación empírica de su éxito, será aplicado a la raza humana. Convence a un primo, bastante influenciable, de que la poderosa CEO de la empresa farmacéutica en la que él trabaja, es una alienígena proveniente de la vecina galaxia Andrómeda y de que ha sido infiltrada en la Tierra para llevar a cabo el siniestro plan. La secuestran. Inmediatamente, le afeitan la cabeza porque, según las investigaciones de Teddy, ella mantiene comunicación con la nave nodriza extraterrestre a través de su cabello.

A partir de esta atractiva propuesta de arranque, “Bugonia” se convierte en una cinta un tanto claustrofóbica, porque casi toda la acción se desarrolla en la finca aislada donde habita Teddy con sus abejas. Es en el sótano donde los tres personajes, que cargan con casi todo el peso de la trama, ejecutan interrogatorios, torturas, diálogos plagados de manipulaciones sicológicas, teorías conspirativas y, también, escenas de brutal violencia. Lanthinos repite a la pareja actoral principal: Jesse Plemons -Teddy- y Emma Stone -Michelle, la CEO-, que utilizó en su largometraje anterior Kinds of Kindness (2024) que a mi me gustó bastante menos por una cierta incoherencia narrativa -obtuvo 6.4 en IMDB-. Buena parte del placer de ver esta partitura cinematográfica, mezcla híbrida de géneros donde cohabitan el suspenso, la comedia negra y la ciencia ficción, radica en ver el feroz enfrentamiento entre Plemons y Stone, en el que ambos demuestran estar en el mejor momento de sus carreras.

De Stone ya sobra lo que podamos decir sobre su calidad interpretativa. Pero Plemons, ya ganador en Cannes como mejor actor el año pasado por Kinds of Kindness, se excede aun más en su prestancia actoral con esta película y ya se perfila como seguro candidato a una nominación al Oscar por mejor actuación masculina en rol principal de cara a la ceremonia del 2026. En el tercer vértice del trío, es de resaltar también la actuación de Aidan Delbis, quien personifica al primo: un delicioso ingenuo de naturaleza dulce y un tanto naif, que se encuentra atrapado en la inclemente confrontación de genios e ingenios entre Teddy y Michelle. “Bugonia” contiene giros sorprendentes, como suele ocurrir en el cine de Lanthinos, y nos va llevando hacia un final sobre el cual resultaría imperdonable que les anticipara algo. Transcurrimos la mayor parte de nuestro tiempo como espectador pensando que el Teddy es un loco de atar, pero luego dudamos con un desenlace donde reside la carga discursiva del film, que nos concita a la reflexión y le imprime a “Bugonia” ese merecido consenso de los críticos sobre su carácter provocador.

Sin abrigo de duda alguna, esta última entrega del director griego pasará a formar parte del núcleo más representativo de su marca de autor: historias bizarras repotenciadas con una poderosa visión estética para la creación de atmósferas -otras dos películas que les recomiendo de este director son: “Langosta” (2015) y “La favorita” (2018)-. La historia es muy original, pero no inédita. Después de haberla visto, me enteré de que “Bugonia” es un remake de un film surcoreano de 2003 Save the green planet, que algunos cinéfilos comparan favorablemente frente a la versión de Lanthinos.

Me habría encantado poder contrastar esa opinión antes de escribir esta reseña, pero no pude acceder a la “original” aunque lo intenté a través de múltiples vías. No debe extrañarnos tampoco que este tipo de opiniones circule a través de las redes, muchos tenemos una tendencia natural a privilegiar las primeras versiones de una historia. Me ocurrió con “CODA” (2021) que obtuvo un descafeinado Óscar, en mi opinión, por cuanto siempre la he valorado como inferior frente a la cinta belga original “La familia Belier” (2014). Son cosas que pasan. En todo caso: dudo mucho que la primigenia surcoreana sea superior en puesta en escena a la poderosa “Bugonia”, así sea verdad que haya perdido algo del salvajismo de su raíz predecesora -no logro imaginarme cómo habría sido ésta en cuanto a niveles de salvajismo, aunque los surcoreanos tienen fama de alcanzar cotas rayando en extraviada locura-. Al final, con el transcurrir de los días me ha quedado latiendo el mensaje sobre la Humanidad que Lanthinos logra colarnos de manera admirable, a pesar de lo bizarro y poco convencional de su propuesta cinematográfica.